La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la reforma al artículo 191 de la Ley del Seguro Social, con 476 votos a favor. Este dictamen se encarga de regular los retiros parciales de los recursos acumulados en la subcuenta de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez, cuando el trabajador enfrenta una situación de desempleo. La reforma ahora avanza al Senado para su análisis y posible ratificación.
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Disposiciones clave de la reforma
La reforma establece requisitos específicos para que los trabajadores puedan efectuar retiros parciales. En primer lugar, la cuenta individual debe contar con al menos tres años desde su apertura y un mínimo de 12 bimestres cotizados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
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En este caso, el trabajador podrá retirar una sola exhibición equivalente a:
- 30 días del salario base de cotización promedio de las últimas 52 semanas, con un límite de hasta 10 veces el valor mensual de la Unidad de Medida y Actualización (UMA).
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Por otro lado, si la cuenta individual tiene cinco años o más, el retiro podrá alcanzar el monto menor entre 90 días del salario base de cotización promedio de las últimas 250 semanas o el 11.5% del saldo acumulado en la subcuenta correspondiente.
La reforma también elimina un párrafo del artículo 191 para mejorar la protección de los recursos y garantizar la adecuada administración por parte del IMSS y la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR). Para implementar estos cambios, el IMSS y la CONSAR contarán con un plazo de 180 días naturales desde la entrada en vigor de la reforma.
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Durante la discusión, diversos grupos parlamentarios presentaron propuestas para modificar el dictamen, pero estas fueron retiradas o no admitidas a debate y finalmente desechadas.
La reforma responde a la necesidad de proteger el ahorro de los trabajadores frente a prácticas fraudulentas detectadas, en las que promotores elevan artificialmente los salarios base de cotización para obtener mayores retiros, poniendo en riesgo el ahorro y las semanas cotizadas. Por ello, CONSAR, en coordinación con el IMSS y ProceSAR, implementa mecanismos de validación para prevenir estas simulaciones.
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