La Velada by Velas Resorts, una experiencia gastronómica única que tuvo lugar a finales de mayo en la Ciudad de México, fusionó la riqueza de la cocina mexicana con influencias internacionales, ofreciendo en cada destino un auténtico recorrido culinario con esencia mexicana.
Bajo la dirección de reconocidos chefs galardonados con estrellas Michelin, como Mikel Alonso y Nahúm Velasco, cada hotel del grupo presentó platillos que reflejan la cultura y el entorno local. Entre ellos destacaron creaciones como el tiradito de kampachi en Casa Velas y Velas Vallarta, así como el solomillo acompañado de vegetales fermentados en Grand Velas Los Cabos.
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En este sentido, durante la velada gastronómica del grupo hotelero en mención, conversamos con Juan Vela Ruiz, CEO de Velas Resorts, para conocer más sobre la historia, filosofía y planes futuros de esta cadena hotelera, quien nos compartió detalles inéditos sobre la evolución del grupo, su apuesta por la experiencia gastronómica y la sustentabilidad, así como los retos que han enfrentado en su camino.
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De un proyecto inmobiliario a un referente en hotelería de lujo
La historia de Velas Resorts comenzó de manera inesperada. Juan Vela nos cuenta que inicialmente no tenían planes de ser hoteleros, sino que surgieron como un proyecto inmobiliario en Velas Vallarta.
“Nosotros nunca pensamos en ser hoteleros, iniciamos como dices, como un proyecto inmobiliario en Velas Vallarta, en 1989. Afortunadamente desde el diseño de ese proyecto inmobiliario, se pensó que fuera algo muy similar a desarrollos que existen en Hawaii, que son una especie de condo-hoteles” explica.
Sin embargo, la crisis económica de Estados Unidos y México a mediados de los 2000 afectó severamente las ventas de condominios, lo que los llevó a replantear su modelo de negocio.
“Nos quedamos con un desarrollo prácticamente iniciado en todas sus etapas; y con la mitad de los condominios, las ventas se redujeron a menos de un condominio por mes… Finalmente nos decidimos operarlo; y a base de prueba y error, al final de siete años formamos dentro de Velas Vallarta un club vacacional, lo que nos permitió salir de nuestro problema de deudas y tener una solidez financiera para iniciar con un proyecto de hotelería.”
Este aprendizaje fue clave para que Velas Resorts diera el salto hacia el turismo de lujo con un concepto innovador. “Cuando pensamos ya en hacer un hotel específicamente, estábamos buscando algo que fuera diferente… tratamos desde un principio de buscar irnos al máximo nivel que pudiéramos imaginarnos,” señala Vela, quien destaca que uno de los pilares fue el tamaño de las suites, “un mínimo de 100 metros cuadrados,” y la calidad gastronómica, con restaurantes diseñados para competir a nivel mundial, cada uno con su propio chef y presupuesto para creatividad.
Experiencias memorables y el concepto de lujo todo incluido
Velas Resorts se distingue por ofrecer un lujo auténtico en un formato todo incluido, algo que no era común en México cuando iniciaron. Juan Vela enfatiza que su propuesta va más allá de la habitación o la comida:
“Nos definimos no como un espacio al que vas a llegar como un huésped a disfrutar de una habitación, ni de consumir en un restaurante, sino como un proveedor de experiencias.”
Para ello, han incorporado servicios para toda la familia, como kids clubs y teens clubs, y han innovado con hoteles boutique para adultos, como el Gran Velas Boutique en Los Cabos, que comparte oferta gastronómica con el Gran Velas cercano, ampliando así la experiencia culinaria para sus huéspedes.
Además, Vela destaca la importancia del spa, que aunque no está incluido en el todo incluido, es un complemento de lujo reconocido internacionalmente.
“Cuando abrimos en Riviera Maya, Virtuoso nos calificó como the Best of the Best spa en el mundo,” comenta orgulloso.
Infraestructura y servicios para grupos y convenciones
Velas Resorts también ha apostado por el turismo de negocios y eventos, con espacios diseñados para albergar grandes grupos y convenciones.
“Cuando abrimos Riviera Maya, conceptualizamos el área de grupos y convenciones como algo al que teníamos mucho interés en participar de una manera muy agresiva. Los salones son extraordinariamente amplios, y con una grandísima diversificación,” explica Juan Vela.
Este enfoque les ha permitido recibir eventos internacionales de alto nivel, posicionando a sus hoteles como una ventana de México al mundo en el sector de congresos y convenciones.
Compromiso ambiental y sustentabilidad
En cuanto a la responsabilidad ambiental, Velas Resorts implementa múltiples acciones para reducir su huella ecológica. Desde el diseño de sus instalaciones con cristales dobles que reducen la entrada de calor, hasta sistemas de aire acondicionado de alta eficiencia que consumen la mitad de energía, pasando por autogeneración, paneles solares para calentamiento de agua y tratamiento de aguas residuales para riego.
“Generamos nuestra propia composta para la jardinería a base de desechos alimenticios con gusanos,” detalla Vela, quien también destaca la capacitación constante del personal y la fuerte cultura interna de orgullo y compromiso con la calidad y la sustentabilidad.
Reconocimiento gastronómico internacional
La gastronomía es un pilar fundamental para Velas Resorts. La llegada de la guía Michelin a México fue un reconocimiento a su esfuerzo.
“El año pasado que llegó la guía Michelin, dos de nuestros restaurantes, uno en Riviera Maya y otro en Los Cabos, fueron reconocidos con una estrella… lo cual habla de algo que nosotros hemos venido haciendo siempre,” señala Juan Vela.
Este nivel de calidad se ofrece sin costo adicional para los huéspedes, reforzando la propuesta de lujo todo incluido.
Planes de crecimiento y nuevos proyectos
Mirando hacia el futuro, Velas Resorts planea expandirse dentro de México, especialmente en las regiones donde ya tienen presencia, buscando siempre que sus nuevos desarrollos tengan un diferenciador claro.
“Estamos en búsqueda del lugar adecuado para poderlo desarrollar… No tenemos desechada la idea de crecer fuera del país, pero no hay ninguna decisión tomada,” adelanta el CEO.
El enfoque seguirá siendo el producto Gran Velas, con la misma calidad, nivel de servicio y amenidades que los han caracterizado.
Juan Vela reflexiona sobre los desafíos más grandes que han enfrentado. “El más difícil fue cuando abrimos Riviera Maya, nos pegó la crisis financiera del 2008, luego el N1H1 en 2009 y la inseguridad en 2010… fue una época muy difícil, porque estábamos iniciando la apertura de un hotel con una deuda importante.”
A pesar de las adversidades, lograron consolidar la marca y fortalecer su presencia en el mercado, aprendiendo a adaptarse y a innovar constantemente.
Velada gastronómica con Velas Resort
La Ciudad de México fue testigo de una velada inolvidable, donde la gastronomía se transformó en un verdadero homenaje a la diversidad y riqueza de los destinos mexicanos que forman parte de Velas Resorts. En este evento, chefs de renombre internacional se unieron a invitados especiales para ofrecer una cena que no solo deleitó el paladar, sino que también evocó paisajes, memorias y tradiciones profundamente arraigadas en cada región.
La propuesta de Velas Resorts fue clara: cada uno de sus hoteles representa un territorio con identidad propia, y cada platillo servido durante la noche fue una narración sensorial que reflejó la esencia única de esos lugares. Bajo la experta guía del chef Mikel Alonso, los asistentes emprendieron un recorrido culinario que fusionó técnica, memoria y paisaje, logrando una experiencia que trascendió lo gastronómico.
La velada comenzó con sabores frescos y vibrantes en Casa Velas y Velas Vallarta, donde se ofreció un tiradito de kampachi acompañado de un ceviche de pork belly con pulpo, evocando la riqueza del mar y la costa. Posteriormente, en Grand Velas Riviera Nayarit, se presentó una terrina de foie gras con higo al vino tinto y crumble de frambuesa, un platillo que invitó a la contemplación y al disfrute pausado, reflejando la sofisticación del destino.
En Grand Velas Riviera Maya, el paladar fue deleitado con un pescado acompañado de puré de maíz y recado, además de una reinterpretación de la tradicional sopa de lima, que resaltó el carácter y la tradición de la península. Por su parte, Grand Velas Los Cabos apostó por la fuerza de su entorno con un solomillo acompañado de puerro, berenjena y ajo fermentado, una combinación que reflejó la dualidad entre el desierto y el mar.
La experiencia continuó con Mar del Cabo, que ofreció una delicada paleta de coco y vainilla de Papantla, acompañada de coulis de maracuyá y detalles de oro comestible, un postre que combinó elegancia y frescura. Finalmente, Grand Velas Boutique Los Cabos cerró la noche con un exquisito crème brûlée de plátano, aceite de oliva y sal Maldon, poniendo un broche de oro a esta celebración culinaria.
Lo que realmente distinguió esta velada fue la intención detrás de cada platillo. Más allá de la técnica y la presentación, los chefs buscaron transmitir la esencia de cada destino, conectando a los comensales con la historia, la geografía y la cultura de México a través de sabores auténticos y memorables.